El desarrollo de una cultura de empresa fuerte y positiva es esencial para todo lugar de trabajo.
Sin embargo, esta puede variar en diferentes aspectos, como por ejemplo la forma en la que tu equipo percibe el negocio o cómo tratan a los compradores, o incluso en cómo los clientes se sienten al respecto. Es decir, el efecto de una buena cultura recorre toda la gama de tus operaciones comerciales.
Está claro que crear un ambiente laboral positivo es más fácil cuando ves a tus colaboradores diariamente, no obstante el contexto actual nos ha obligado a cambiar nuestro modelo de negocio.
Es evidente que este entorno puede llegar a ser desafiante, y más cuando todo el equipo se encuentra a miles de kilómetros de distancia.
Según un estudio de la Comunidad Laboral Trabajando.com, 1 de cada 4 personas valora el ambiente laboral por encima de cualquier otro aspecto en el trabajo.
Entonces la pregunta clave aquí es, ¿Cómo logramos crear una cultura positiva si toda la empresa se encuentra en remoto y qué herramientas nos podrían ayudar?
La empresa Efficy comparte 5 estrategias que ellos mismos han puesto en marcha en sus más de 200 colaboradores que se encuentran en diferentes partes del continente europeo y americano.
1. Crear una comunidad corporativa
La mayoría de los colaboradores, incluso los que trabajan en remoto normalmente, se sienten solos cuando trabajan para grandes corporaciones. La solución a implementar fue crear una cultura empresarial que prioriza el sentido de comunidad a través de la comunicación y colaboración activa y saludable.
Por ejemplo, siendo una empresa que tiene muchas nacionalidades, el equipo de RRHH se dedica a crear diferentes comunicaciones internas (como newsletters), donde presentan a cada colaborador y qué función tienen.
Además comparten enhorabuenas ya sea de la empresa o de alguien del equipo y crean actividades como clases de yoga online, juegos, clases de cocina, etc.
2. Centralizar su comunicación en un solo lugar
Uno de los objetivos para construir una cultura de empresa positiva es comunicar información relevante en todo momento. Y esto se puede lograr, de forma efectiva, implementando una estrategia de CRM.
Qué es CRM: CRM viene de Customer Relationship Management. Es un software de ventas y de gestión de relaciones tanto empresarial como de clientes. También se entiende como una estrategia de empresa que pone al cliente y al equipo en el centro de todo.
Lo bueno de poner esto en marcha es que ayuda a tener toda la información en un solo lugar pudiendo así que todo el equipo se mantenga conectado al 100% con la empresa.
3. En tiempos de incertidumbre, reconocer al equipo por éxitos alcanzados
Cada encargado de equipo es el encargado de dar la enhorabuena a esos colaboradores que se esfuerzan y dan valor a la empresa.
Ellos se encargan de reconocerlos y recompensarlos públicamente, ya sea en reuniones telemáticas vía Teams o en el apartado de anuncios que el CRM pone a disposición a toda la empresa.
Esta práctica aumenta su sentido de pertenencia, confianza y lealtad. Además, les anima a ser más productivos y estar felices en la empresa.
4. Reuniones a micrófono abierto
De forma paulatina crean reuniones enfocadas en conocer el estatus de la empresa, donde al terminar se pone a disposición un espacio libre para poder expresar alguna queja, preocupación o sugerencia, con el fin de recibir retroalimentación en tiempo real.
Además, crean otras reuniones enfocadas en tomar el aperitivo de forma digital. Aquellos trabajadores que lo deseen, se reúnen por videollamada para conversar y tomar algo, eso sí, todos desde la comodidad de su casa.
5. Estimular la formación profesional de forma constante
Desde el día uno, la empresa siempre ha creído e invertido en la formación constante de cada uno de sus colaboradores.
Saben que si un colaborador de por sí ya rinde bien y al prepararlo más, puede dar más valor en todo sentido de la palabra y ser autosuficiente.
Dependiendo del departamento que el trabajador esté, cada encargado (junto con el equipo de RRHH) pone a su disposición formaciones con título profesional en diferentes plataformas.
Incluso si un equipo entero quiere reforzar algún idioma (inglés o francés), la misma empresa se encarga de evaluar qué nivel tiene cada trabajador y en base a ello se define las clases.
En conclusión, crear una cultura empresarial de forma positiva depende mucho de la retroalimentación del equipo y de la creación de estrategias que fomenten confianza y ayuden a todo colaborador a dar más valor en el negocio.
Como dice María Guzmán, Marketing Officer de Efficy, “la falta de confianza para monitorizar el trabajo crea la necesidad de enfocarlo en el proceso y no en la persona que lo realiza. Es aquí que como empresas debemos de establecer formas de colaborar en equipos alejados geográficamente y, sobre todo, tener la capacidad para asignar responsabilidades y saber que éstas son resueltas, manteniendo siempre la cultura de empresa positiva y cuidando a nuestros equipos.”
Colaboración: www.marketingdirecto.com